Muchas veces nos vemos envueltos en el desconocimiento de todos los organismos que hacen parte de nuestro planeta. Por eso, reconocemos la importancia de abarcarlos y explicar su funcionalidad en el entorno. Dicho lo anterior, hoy hablaremos de los organismos autótrofos los cuales son aquellos seres que necesitan la luz para fabricar su propio alimento, ya sean los vegetales o plantas, y absorben la energía solar para transformarla en energía química.
A través de la fijación de carbono, los autótrofos obtienen su carbono directamente del dióxido de carbono (CO2) que forma el aire que respiramos o disuelto en el agua, este carbono inorgánico lo utilizan para crear compuestos de carbono orgánico para crear sus propias células. Esta transformación la realizan a través de un mecanismo denominado fotosíntesis.
Para mencionar algunos ejemplos de estos organismos están las plantas verdes y las algas que son los seres autótrofos por excelencia, concretamente utilizan la luz como fuente de energía. Estos organismos son fundamentales para las cadenas alimentarias de todos los ecosistemas del mundo. También están las bacterias del hierro que son quimioautótrofas y obtienen energía y alimento de las sustancias inorgánicas que existen en su entorno; estas las podemos encontrar en suelos y ríos ricos en hierro. Finalmente dentro del grupo de estos organismos están las bacterias del azufre que son quimioautótrofas y viven en acumulaciones de pirita, que es un mineral hecho de azufre, del que se alimentan.
La importancia de estos organismos radica en que proveen de alimento de forma directa a los herbívoros y de forma indirecta a los animales carnívoros; del mismo modo, como ya se ha mencionado en el desarrollo de este artículo, con la capacidad de estos organismos de sintetizar todas las sustancias esenciales para su metabolismo a partir de sustancias inorgánicas, logran optimizar los procesos naturales y ser parte esencial en la cadena alimenticia, absorbiendo la energía solar o fuentes inorgánicas, convirtiéndolas en moléculas orgánicas que son utilizadas para desarrollar funciones biológicas como su propio crecimiento celular y la de otros seres vivos llamados heterótrofos que los utilizan como alimento.
Por: Luisa Arango – Comunicadora Social y Periodista (UPB)
Fuentes utilizadas: