Siendo el petróleo un recurso natural no renovable que aporta el mayor porcentaje del total de la energía que se consume en el mundo, hoy por hoy es el motor de la economía para muchos países puesto que genera reservas significativas y de alta prosperidad para el desarrollo de la inversión y el fácil acceso a los mercados financieros internacionales.
En el caso de Colombia, el petróleo es el principal generador de renta para sus regiones por encima incluso del café; sin embargo, las consecuencias humanas y ambientales que trae la extracción de petróleo son potencialmente peligrosas, especialmente para las cuencas de mayor actividad exploratoria que son: los valles Superior y Medio del Magdalena, Catatumbo, La Guajira, cordillera Oriental, Putumayo y Llanos Orientales.
El petróleo tiene el problema y es que es insoluble en agua y por lo tanto, difícil de limpiar. En el caso de las aguas subterráneas, el mayor deterioro se manifiesta en un aumento de la salinidad, por contaminación de las napas con el agua de producción de petróleo de alto contenido salino. Y es que la industria petrolera también afecta potencialmente a la fauna, ya que las aves son las más afectadas por contacto directo con los cuerpos de agua o vegetación contaminada, o por envenenamiento por ingestión, siendo un efecto letal.
La industria petrolera actualmente debe cumplir normas y procedimientos estrictos en materia de protección ambiental, de las cuales se pueden mencionar la Ley 99 de 1993 Art, 8 simplificada por Decreto 2150 de 1995, Art. 132, que propone que la licencia ambiental cumpla con una serie de requisitos, permisos y autorizaciones que involucren el ambiente, para poder realizar el completo desarrollo de las actividades petroleras; y por otrolado el Decreto 2820 de 2010, Art.8, numeral 1, literal b MADS donde se expresa que los proyectos de perforación exploratoria que se realicen fuera de un área de producción petrolera deben licenciarse.
Aunque son varias las Leyes, Decretos y Resoluciones Ambientales para la industria del Petróleo, sigue existiendo preocupación mundial, pues la falta de control sobre las técnicas perjudiciales utilizadas en la industria petrolera es cada vez menor, y las ansias de poder son la que degradan el ambiente cada vez más.
Por: Luisa Arango – Comunicadora Social y Periodista (UPB)
Fuentes utilizadas:
- http://www.anh.gov.co/Banco%20de%20informacion%20petrolera/Colombia%20Petrolera/Paginas/default.aspx